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  • Categoría de la entrada:Mis Cosas
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  • Tiempo de lectura:3 minutos de lectura
  • Última modificación de la entrada:10/05/2023

 

 

 

Un tipo estaba parado a la orilla de la carretera en medio de una oscura y tenebrosa noche haciendo autostop, a la vez que estaba  descargando una tremenda tormenta.

Pasó un tiempo, pero nadie se paraba. La tormenta era tan fuerte y caía tal cantidad de lluvia, que apenas sí se alcanzaba a ver a unos 2 metros de distancia. De repente vio como un coche negro, se acercaba lentamente y al final se detiene.

El hombre, sin dudarlo, por lo precaria de su situación, se sube al coche y cierra la puerta; al acomodarse en el asiento trasero se da cuenta con asombro que no hay nadie frente al volante.

El coche arrancaba suave y pausadamente, el tipo mira hacia la carretera y ve con horror desorbitante que el coche se dirige inexorablemente hacia una curva; asustado comienza a rezar e implorar por su salvación, al advertir su trágico destino; el tipo no ha terminado de salir de su espanto cuando justo antes de llegar a la curva, entra una mano tenebrosa por la ventana del chofer y mueve el volante lentamente, pero con firmeza.

Paralizado del terror y sin aliento se aferra con todas sus fuerzas al asiento, inmóvil e impotente ve como sucedía lo mismo en cada curva del tenebroso y horrible camino, mientras la tormenta aumentaba su fuerza.

El tipo sacando fuerzas de donde ya no quedaban, se baja del coche y se va corriendo hasta el pueblo más cercano, deambulando todo empapado, se dirige a una taberna que se percibe a lo lejos. Entra en ella y pide un güisqui y temblando aún, les empieza a contar a todos los presentes, la horrible experiencia que acababa de vivir.

Se hizo un silencio ante el asombro de todos los presentes, el miedo asomaba por todos los rincones del lugar.

Al cabo de una media hora llegan dos tipos todos mojados y le dice uno al otro en tono muy enfadado:

– «¡Mira Juan! ¡Mira dónde está el hijo de put*, que se subió al coche cuando lo veníamos empujando!!!».

De la Web.
Publicado por: Rovica.

Autostop

Esta entrada tiene 9 comentarios

  1. macalder02

    Un momento de terror innecesario pero que causa risa. Saludos Rovica.

    1. Rovica

      La noche lo confundió y al final nada era lo que parecía. Un abrazo amigo Manuel.

    1. Rovica

      Gracias Marcos. Me alegra saber que te gustó. Un abrazo amigo.

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