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  • Última modificación de la entrada:13/03/2021

 

 

El 8 de Marzo somos todas las mujeres del Mundo, TODAS. Es la mujer que se levanta cada día a fregar escaleras, a abrir la tienda, el bar o la oficina. Las mujeres que se encuentran en la primera línea en la lucha contra el covid y otras enfermedades, como trabajadoras de la salud, cuidadoras, limpiadoras, innovadoras y organizadoras. Son las trabajadoras de tiendas de alimentación. Las mujeres que trabajan en primera línea de atención al público.  Es la mujer que decide tener hijos y la que no. Es la mujer que decide renunciar a su trabajo para cuidar de su familia.  Son todas esas trabajadoras habitualmente invisibles. Es la que lucha día a día  sin hacer ruido por tener una vida mejor. El feminismo soy yo. Yo, que tengo una vida independiente, que me compré MI coche con MI trabajo, que me compraré MI casa con MI trabajo, que decido el rumbo de MI vida cómo y cuando me da la gana. El feminismo  lo somos TODAS,  por el simple hecho de ser mujeres y de querer avanzar en la vida.

El «feminismo» hizo suyo el 8 de marzo, queriendo cambiar la  imagen de este Día. No hay  derecho a juzgar ni decidir quien es más feminista o menos. Es una vergüenza que «algun@s» se  quieran apropiar de ese término y tener la exclusividad del derecho a usarlo.  Yo no pertenezco a ningún bando inútil de esos que se empeñan en mantener y fomentar el odio para mantener así  su modo de vida. No, por ese  sentimiento  de odio constante, algo que nos perjudica a tod@s. Las mujeres somos mucho más y mejor que todo eso.

El 8M no necesitamos salir a ningún sitio para seguir avanzando. No saldremos porque somos conscientes de la situación  que vivimos, somos responsables, somos solidarias con todas las personas que lo están pasando mal y porque queremos proteger a nuestros seres queridos.

En el 8M recordaremos a todas las MUJERES y HOMBRES que hicieron posible que tantas y tantas puertas se abrieran para no volver a cerrarse nunca.

Publicado por: Rovica.

 

Esta entrada tiene 10 comentarios

  1. Cuando la política y los extremismos se meten en estos temas suelen empeñarlo todo.
    Totalmente de acuerdo con lo que dices.
    Saluditos. 😉

    1. Rovica

      Muchas gracias Littlecatonthemoon. Los extremos nunca serán buenos y si encima hay odio e intereses por medio, mucho peor. Un abrazo amigo. 🤗😊

  2. carlos

    Vaya mi aplauso por delante. Un abrazo.

  3. ambiguos sentimientos…que la lucha es justa y necesaria…adelante compañeras….pero por que caer en lo que nunca ha funcionado…salir y romper lo material….si lo que necesitamos destruir es lo mental…esa categorías culturales, morales y demás creencias que siguen inamovibles…qué caso tiene marchar si la mentalidad sigue igual….vayamos al origen…sino…nada cambiará…sorry me expongo a ser linchado…besos al vacío desde el vacío

    1. Rovica

      La virtud es una disposición voluntaria adquirida, que consiste en un término medio entre dos extremos malos, el uno por exceso el otro por defecto…(Aristóteles). Un abrazo amigo Cruzar La Noche.

  4. Te contesto desde mi experiencia como mujer habiendo estado en el mundo laboral bastantes años porque lo que yo he conseguido, con muchas trabas es cierto, masculinas y femeninas también, porque el enemigo de la mujer muchas veces es la propia mujer, ha sido con mi tesón, esfuerzo, fuerza de voluntad y trabajo, mucho trabajo. Es verdad también que haciéndolo doblemente bien de lo que lo haría el hombre, pero diciéndome a mí misma que podía hacerlo, el movimiento se demuestra andando. Mi generación creo que fue pionera en muchas cosas, pero demostrando con hechos lo que éramos y somos capaces de hacer. Estoy con Cruzar la Noche, es cuestión mental. Que hay aún muchas cosas que mejorar, sí, pero ahí estaremos nosotras para demostrar a todos, sin excepción, que se puede. Perdona la extensión. Un abrazo.

    1. Rovica

      Llevas razón, como siempre, Paz. Es triste admitirlo, pero es un hecho que el peor enemigo de la mujer, es la propia mujer. Por lo tanto, habría que hacer un examen de conciencia y ver si es posible y en qué medida cambiar la percepción de la mujer sobre sí misma. Las mujeres nunca no lo tuvieron, ni lo tienen fácil. Sin embargo, algunas de ellas hicieron frente a los estereotipos y rompieron barreras hasta conseguir brillar en sus respectivos campos y, lo más importante, abrir camino, para que otras mujeres lo tengan “un poco” menos difícil para poder seguir su vocación y sus sueños. Buen sábado amiga. Besos.

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