Siempre me esmeré por dar lo mejor, me entregué sin condición, arriesgué por amor. Tenía miles de miedos pero siempre estuve ahí mostrando y dando lo mejor de mí. No me arrepiento de lo entregado, mucho menos del tiempo dedicado. Me quedo con la tranquilidad de saber que todo lo que hice fue con buena intención, todo lo que di fue real, sincero y de corazón. Hoy sonrío y estoy en ese bendito limite de estar en Paz con la conciencia…Y ahora sé que yo jamás perdí…A mí me perdieron…
Rovica.
Ese tiempo no es perdido, es vida ganada. Hay quien se da cuenta de ello y llega demasiado tarde, aunque para intentarlo siempre haya tiempo. Feliz domingo.
Una forma de felicidad interior consiste en hacer el bien, sobre todo, a los demás y para eso siempre hay tiempo. Buena tarde de domingo Paz. Un abrazo.
Recibir como herencia, la satisfacción. No tiene precio.
Lo que se hace con el corazón al final tiene su recompensa. Buena tarde de domingo Marcos. Un abrazo amigo.
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